CONTRA LA PRIVATIZACION DE SMAPA

Pendulo de Chiapas

En Julio de 2010 la Asamblea General de las Naciones Unidas declaro el uso del agua y saneamiento como un derecho  humano para el pleno desarrollo de todas las personas, así mismo exhorto a  todos los países a que proporcionen recursos financieros suficientes para que se aumente la capacidad y la transferencia de tecnología para que se intensifiquen los esfuerzos con el fin de proporcionar a toda la población un acceso económico al agua potable y saneamiento.  El actual Gobierno Municipal de Tuxtla Gutiérrez, de extracción priista parece ir a la inversa de lo declarado por la ONU, si bien es cierto, es ésta administración municipal  la que formalizo la denuncia ante la Procuraduría General de Justicia del Estado por la malversación de recursos de las administraciones pasadas, “por robo en cajas, plantas y obras mal ejecutadas por un monto superior a 558 millones de pesos y se declarara la quiebra de las finanzas del SMAPA”.  Eso no fue más que un pretexto para intentar legitimar el proceso de privatización del sistema municipal de alcantarillado y agua potable de la capital de Chiapas y con ello ceder la administración y comercialización de este recurso natural a una empresa transnacional española, como el mismo alcalde Samuel Toledo, se lo declaro en enero de 2013  a la periodista chiapaneca Itzel Grajales.  El proyecto de privatizar SMAPA bajo el eufemismo de “mejora integral de gestión” es más grave de lo que parece, pues no solo se estaría contraviniendo la Constitución Política de México, los Tratados Internacionales, si no se estaría generando la mercantilización de un derecho humano y de un recurso natural que es propiedad de la nación, con lo cual se estaría abriendo la posibilidad de un estallido social, basta recordar que en el año 2000 mucha represión fue el saldo que costo a los bolivarianos para que su gobierno echara atrás la privatización del agua potable en la ciudad de Cochabamba, pues la transnacional norteamericana Bechtel inmediatamente después de que adquirió, la distribución, almacenamiento y comercialización del agua en esa localidad, incremento los costos del uso y disfrute del agua hasta en un 300 %. Como bien dice Gustavo Castro miembro de la CIEPAC A.C “el consumo del agua no necesita publicidad. La necesitamos todos. Es un recurso y bien de la humanidad y no puede estar en manos privadas”     Como ya lo hemos mencionado con la privatización de SMAPA se estaría violentando el constitucionalismo mexicano pues nuestra carta magna claramente señala que:   Artículo 4 “Toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible. El estado garantizara este derecho y la ley definirá las bases, apoyos y modalidades para el acceso y uso equitativo y sustentable de los recursos hídricos (…) Artículo 27 “son propiedad de la nación las aguas de los mares territoriales (…) las aguas marinas interiores; las de las lagunas  y esteros (…) lagos interiores (…) las de los ríos y sus afluentes (…) las de los manantiales (…)  Artículo 115 Fracción III “Los municipios tendrán a su cargo las funciones y servicios públicos siguientes: a) agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición de sus aguas residuales”   Hasta este momento son sólo 6 ciudades (de las 117 que existen en México con más de 100 000 habitantes según el censo realizado por el INEGI en 2010)  las que han privatizado el servicio de la distribución del agua, según un estudio realizado por la Asociación de Usuarios  de Aguas bajo el título de La participación privada en los organismos operadores y el derecho humano al agua.  En el Congreso del Estado de Chiapas el pasado miércoles 10 de Julio se dio lectura al dictamen del proyecto de privatización de SMAPA, con lo cual se transferiría el manejo, distribución, almacenamiento y comercialización del agua potable y su saneamiento en Tuxtla Gutiérrez, mediante un “contrato de prestación de servicios” a la empresa que “gane” la licitación por un periodo de 25 años.  De ser aprobado por los legisladores chiapanecos el proyecto de privatización del agua en la capital del estado, se estaría concretando el desprecio al derecho humano de todos los tuxtlecos para acceder de manera justa y equitativa al uso del agua, pues sin temor a equivocarme se vislumbraría el aumento elevado e inmediato al costo del uso del agua, el autoritarismo en la distribución del vital líquido, el incremento de multas y otras sanciones por el retraso en el pago del consumo de este bien público y seguramente lo más grave la restricción del agua hacia las clases más marginadas. Parafraseando al Diputado Federal de Movimiento Ciudadano, Ricardo Mejía “lo que se tiene que combatir a fondo es la corrupción que impera en SMAPA, lo que permitirá que este organismo municipal salga, por un lado, de la crisis financiera en la que se encuentra” Twitter @abrahamjose83 Facebook/ Abraham Gómez José  Abogado Chiapaneco.